"Heidi's Head" Kleenex

El Punk vaginal de Kleenex es más Punk por vaginal que por Punk, y a nosotros lo vaginal nos va mucho, casi tanto como el Punk, la Anarquía, las medianas a noventa céntimos del Döner de Gerona con Caspe, los Encantes Viejos y su poderoso nombre o todos aquellos bares, que los hay, que te dejan la botella en la mesa cuando pides un carajillo. Pero ante todo nos va lo vaginal, hombres y mujeres vaginales que bailan para adentro en contra de la falocracia y buscan canciones porque les va la vida en ello; gentuza atocinada, ya saben, que solapan resacas mezclando espirituosos y luego encuentran sus zapatos en la nevera.

"Comfort" June Brides

No sabemos por donde empezar aunque la historia sea corta: un LP, un EP y algunos singles en no más de dos años. Luego todos se pusieron a trabajar en oficinas, pero las guitarras translúcidas, la ropa vieja, los peinados de precisión nanométrica y las canciones gloriosas quedaron para siempre. June Brides son ni una canción mala, ni un cambio de acorde porque sí, ni una floritura excedente, ni un verso aleatorio. Comfort son los dos minutos mejor aprovechados del pop y Atocinados querría que se escuchara siempre, en todas partes.

"212" Azealia Banks feat.Lazy Jay

Es normal que hoy en día triunfe tanto la pachanga Electro que cristaliza en 212, música de entrepierna que alcanza su cénit en esta era digital donde un ordenador y un par de guarradas con flow te pueden conformar un rompepistas de paro cardíaco. La muchachada conoce el expolio de Diplo regurgitado por Mia y no ve diferencia entre campaña viral y Música. Entonces triunfa pero no gusta, nadie cree en su tradición y se desprecia su origen mestizo de Bonx y Caribe que no para de follar, todos contra todos, en una orgía dinástica de músicos sin par: Yellowman, Afrika Bambaataa, Voltio, Technotronic...

"Warm Leatherette" The Normal

Es frío, repetitivo e incluso desalentador. Es 1978, un Korg 700s y media amfetamina. Es el accidente de Daniel Miller -el tipo de la foto, ni un botón por abrochar- creador de Mute Records y, de rebote y por desgracia, de todos esos patanes convencidos de que girar un potenciómetro es más contemporáneo que golpear una guitarra. The Normal no podía aprenderse los dos acordes del punk y optó por apretar botones, y ya escuchan: el halo incómodo e investigador de la mejor New Age criogenizado en esta apática canción. Un puto emblema.